😤 ¿Baja voluntaria o despido provocado? El riesgo de “forzar” la extinción para cobrar el paro ⚖️

😤 ¿Baja voluntaria o despido provocado? El riesgo de “forzar” la extinción para cobrar el paro ⚖️

Un trabajador deja de acudir tres días seguidos, dice a su responsable que “quiere que lo despidan para poder cobrar el paro” y comenta que va a montar su propio negocio. La empresa intenta comunicarse sin éxito y, ante el silencio, tramita su baja como dimisión. El empleado demanda por despido verbal.

📄 Pero el TSJ de Cataluña, en su Sentencia nº 4201/2024, de 18 de julio (ROJ: STSJ CAT 4898/2024, ECLI: ES:TSJCAT:2024:4898), confirma que no hubo despido, sino baja voluntaria en MAISONS DU MONDE ESPAÑA.

👉 Los hechos eran claros:

El trabajador dejó de acudir desde el 22 de octubre de 2022, sin justificar sus ausencias. La directora de tienda comunicó a RRHH que el empleado había manifestado querer un “despido” para acceder al paro y que, además, tenía previsto abrir su propio negocio. La empresa le envió un burofax advirtiendo que, si no se incorporaba, se entendería que causaba baja voluntaria (aunque no llegó a ser recogido).

Ante estas circunstancias, el tribunal considera que la conducta del trabajador revelaba de forma clara e inequívoca su intención de romper el vínculo laboral, incluso sin una carta firmada o comunicación expresa.

💡 Recuerda el TSJ:

“El trabajador puede decidir, unilateralmente, la extinción del contrato de trabajo sin alegar causa alguna, pero para ello se precisa una manifestación clara e inequívoca, expresa o tácita, con una conducta que, de modo concluyente, revele el elemento intencional decisivo de romper la relación laboral.”

En otras palabras: “forzar el despido” dejando de ir al trabajo no funciona.

Cuando la conducta demuestra una voluntad firme de irse, los tribunales califican la salida como baja voluntaria, con todas sus consecuencias: sin indemnización y sin derecho a paro.

💬 Si un trabajador quiere marcharse, puede hacerlo libremente. Pero no puede simular un abandono esperando que la empresa lo despida para cobrar. Esa estrategia suele acabar mal.

🔎 En este caso, el TSJ interpretó que el silencio, las ausencias y las declaraciones del trabajador eran suficientes para entender extinguida la relación por decisión suya.