📱🚘 Despedido por grabarse con el móvil mientras conducía a 175 km/h por autovía y colgarlo en sus estados de #WhatsApp, accesibles por otros trabajadores de la empresa.

DESPIDOS

Óscar Ramon

5/14/20251 min read

despido exceso velocidad
despido exceso velocidad

📱🚘 Despedido por grabarse con el móvil mientras conducía a 175 km/h por autovía y colgarlo en sus estados de #WhatsApp, accesibles por otros trabajadores de la empresa.

¿Procedente o improcedente?

🔹 Un trabajador fue despedido tras grabarse con su móvil conduciendo un vehículo de empresa a 175 km/h por la autovía (límite: 120 km/h) y publicar el vídeo en sus estados de WhatsApp. El jefe de logística reconoció el vehículo y varios compañeros capturaron la publicación.

🔹 La empresa calificó esta conducta como una falta muy grave por imprudencia temeraria y desobediencia, al amparo del artículo 54.2 b) y d) del Estatuto de los Trabajadores y del Convenio Colectivo aplicable.

🧑‍⚖️ El Juzgado de lo Social nº1 de Toledo declaró el despido procedente, y esta decisión fue ratificada por el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha.

🔍 En su sentencia nº 462/2025 (Recurso 184/2025), de fecha 21 de marzo de 2025
📌 ROJ: STSJ CLM 671/2025
📌 ECLI: ECLI:ES:TSJCLM:2025:671

El TSJ rechazó el recurso del trabajador por falta de fundamento probatorio y confirmó que la empresa había acreditado los hechos:

📸 Las capturas del estado de WhatsApp,
👨‍🔧 La identificación del vehículo por el jefe de logística,
🗣️ Y el testimonio de los compañeros.
T
odo ello validó una conclusión clara: el trabajador puso en riesgo su vida, la del resto de conductores y el patrimonio de la empresa.

📍 Lo más relevante: El Tribunal reconoce que los mensajes o pantallazos de WhatsApp no son prueba documental ni pericial a efectos de revisar los hechos probados en suplicación. No obstante, pueden valorarse en juicio como medio de reproducción de imagen y sonido, y en este caso, unidos a la prueba testifical, fueron suficientes para acreditar la conducta del trabajador.

🔚 Conclusión: Publicar una imprudencia grave en redes sociales no solo tiene consecuencias sociales, sino también laborales. En este caso, la temeridad al volante acabó con la relación laboral de forma definitiva.